¿Sabías que durante el primer año de edad se definen los hábitos alimenticios de una persona? Así es, por eso es importante que durante el primer año de vida, brindemos a nuestros hijos alimentos nutritivos y saludables, libres de conservadores, evitar el azúcar y el exceso de sal, así como dar a probar verduras y frutas de manera individual, de esta manera tu bebé conocerá los sabores exactos de cada alimento y desarrollará gusto por ellos, ya que no conoce otros.

Si damos a nuestros hijos comida chatarra, dulces, refrescos, comidas muy condimentadas durante el primer año, ellos asociarán este tipo de alimentación como natural y “normal”, y es así que continuarán durante toda su vida llevando malos hábitos alimenticios inculcados en la niñez.

¿Qué puede provocar en una persona adulta haber tenido malos hábitos alimenticios de pequeño?
• Obesidad
• Adicción a la azúcar
• Problemas renales
• Problemas de colitis
• Diabetes
• Entre muchos otros padecimientos también emocionales
Las emociones juegan un papel muy importante en nuestra alimentación, si nos alimentamos de manera saludable, nuestro cuerpo se siente bien y agradecido, tenemos más energía y más salud, todo esto crea personas felices y sanas. En cambio llevando una alimentación a base de grasas saturadas, comida chatarra, exceso de azúcares, carbohidratos, nuestro cuerpo lo resiente además de con padecimientos físicos, falta de energía, baja de ánimo y autoestima, poca capacidad para desarrollar pensamientos positivos.
Ahora ya sabes que tan importante es el inicio de la alimentación complementaria y como puede afectar el futuro de tu bebé, cuida su sana nutrición durante sus primeros años, inculcarle buenos hábitos alimenticios es uno de los más preciados tesoros que puedes regalar a tus hijos.