Independientemente de que usted sea una madre primeriza o de que vaya a tener a su cuarto bebé, los días y las semanas inmediatamente posteriores al nacimiento de su bebé pueden ser tan agobiantes como alegres y emocionantes.
Muchas mujeres experimentan sentimientos de tristeza después del parto, que van de la breve tristeza posparto a una depresión más profunda y duradera conocida como depresión posparto.
La tristeza posparto y la depresión posparto son más frecuentes después del parto de lo que mucha gente cree. Es importante que las madres que acaban de dar a luz (y sus allegados) entiendan los síntomas de la depresión posparto y acudan a la familia, amigos y profesionales médicos para que las ayuden.
Con el apoyo y el tratamiento adecuados, las madres deprimidas pueden convertirse en unas madres felices y sanas.
Causas
La causas exactas de la depresión posparto se desconocen. Los cambios en los niveles hormonales durante y después del embarazo pueden afectar el estado anímico de una mujer. Muchos factores distintos a los hormonales también pueden afectar el estado de ánimo durante este período:
- Cambios en el cuerpo a raíz del embarazo y el parto
- Cambios en las relaciones laborales y sociales
- Tener menos tiempo y libertad para sí misma
- Falta de sueño
- Preocupaciones acerca de su capacidad para ser una buena madre
¿Qué hacer?
Reposar, alimentarse bien y contar con el apoyo adecuado son importantes, ya que estar agotada, dormir poco o sentirse estresada pueden empeorar los sentimientos de tristeza.
Para afrontar la tristeza posparto, las madres que acaban de dar a luz deben tratar de aceptar la ayuda de sus allegados los primeros días y semanas después del parto. Deje que su familia y amigos la ayuden con los recados, la compra de alimentos, los quehaceres domésticos o el cuidado de los niños. Deje que alguien prepare la comida o atienda al bebé mientras usted se relaja con una ducha caliente, un baño relajante o toma una siesta.
Descanse al máximo y coma alimentos nutritivos. Hablar con personas cercanas o con otras madres que acaban de dar a luz puede ayudarle a sentirse apoyada y recordarle que no está sola. No reprima el llanto si tiene la necesidad de llorar un poco, pero trate de no obsesionarse con las ideas tristes. Deje que la tristeza posparto siga su curso y pase.
Cuándo llamar al médico
Si la tristeza posparto dura más de una o dos semanas, hable con su médico para saber si una depresión posparto podría ser la causa de su estado emocional.
¿Cómo puedo obtener ayuda?
Si está teniendo problemas en el estado de ánimo, la ideas y los sentimientos después del parto, explíqueselo a su médico. Cuénteselo también a alguien que sea de su confianza, como su pareja, un amigo o un familiar. Este es un buen momento para acudir a alguien y aceptar la ayuda y el apoyo de sus allegados.
Aparte de recibir tratamiento para la depresión posparto, hay pequeñas cosas que pueden hacer más llevaderos los momentos difíciles. Tal vez le ayude:
- Dedicarse tiempo a sí misma.Contrate a un cuidador en un horario regular. Así, tendrá la seguridad de tener tiempo para sí misma y sabrá cuándo.
- Centrarse en programar pequeñas cosas para el final del día.Se podría tratar de una ducha caliente, un baño relajante, un paseo por su barrio o visitar a una amiga.
- Leer algo que levante el ánimo.Debido a que la depresión puede dificultar la concentración, elija algo ligero y positivo y que se pueda leer a ratos cortos.
- Permitirse pequeños placeres sencillos.Hojear una revista, escuchar música que le guste, tomarse una taza de té.
- Estar con otras personas.Busque oportunidades para pasar tiempo con otros adultos, como la familia y los amigos, quienes le pueden brindar apoyo y buena compañía.
- Pedir ayuda.No se avergüence por tener que pedir apoyo emocional o ayuda para cuidar del bebé o hacer las tareas domésticas.
- Aceptar la ayuda.Aceptar la ayuda no la convierte en una inútil; si acude a alguien, se estará ayudando a sí misma y a su bebé.
- Descansar.Ofrezca a su hijo un lugar silencioso para dormir, e intente descansar cuando lo haga él.
- Moverse.Una caminata diaria puede ayudarle a levantar el ánimo. (Consulte a su médico antes de iniciar cualquier nuevo programa de ejercicio físico).
- Tener paciencia.Debe saber que puede costarle un tiempo encontrarse mejor; vaya paso a paso.
- Ser optimista.Trate de pensar en todas las pequeñas cosas por las que se siente agradecida.
- Unirse a grupos de apoyo.Pregúntele a su médico o al centro de mujeres de su localidad sobre los recursos disponibles.